Antón es un tipo especial. Tuve la suerte de conocerlo hace ya 10 años y la conexión entre ambos fue fantástica, y puedo decir, que ha día de hoy tenemos una gran amistad. Le he visto crecer como profesional y como deportista de cerca y de lejos, con sus aventuras al otro lado del charco, pero siempre hemos tenido un momento para mandarnos un mensaje, felicitarnos por nuestros cumpleaños y fiestas y seguir en contacto. que decir... un buen tipo y mejor persona.
Antón es para mi mucho más que un entrenador. Detrás de cada sesión sé que hay mucho mas que metros, ritmos o kilómetros. Hay, como decirlo, un perfecto sincronismo entre mi vida y mis entrenos. Entrenar para mi es importante, pero no lo es todo, y que alguien entienda, respete y se adapte a eso apoyándome en cada fase (incluso en alguna fase q he estado enfermo o lesionado) pues no tiene precio. El mejor conocimiento del triatlón durante años, en alfombra roja para mi, todo un lujo.
Desde que entreno con Antón he experimentado una mejoría notable en mi rendimiento, pero lo que más valoro es la capacidad de adaptar los entrenamientos a mi día a día, sin que ello suponga un quebradero de cabeza.
Si existiese una vertiente de entrenamientos en Triatlón llamada "entrenamiento consciente", Antón Ruanova debería ser su fundador. Siempre pendiente de cada detalle, más allá del rendimiento deportivo.
3 comentarios:
Anda que non debe molar que che veña unha visita a casa e vexa unhas zapatillas no forno :-D
Moi chulas!
Sorte en Ponte, estaremos ahí animando.
Oe, pero ándate con coidado que agora andan controlando o tema do doping tecnolóxico eh! jeje
Alfredo: vémonos o sábado, se chego a tempo terás uns berros para animarvos.
Alberto: non chega a ter un motorciño pero seguro que a estimulación que nos producen se podería considerar doping psicolóxico. jeje
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